El Gobierno de Brasil propuso a la Argentina pagar por las exportaciones brasileñas en yuanes para evitar depender de las reservas en dólares del Banco Central y mantener el flujo del comercio bilateral, anunció este miércoles el ministro de Economía del país vecino, Fernando Haddad.

“Enviamos al Gobierno argentino una propuesta de garantía en yuanes para las exportaciones brasileños, para los exportadores brasileños es una cosa buena, será una buena noticia si Argentina acepta”, dijo Haddad en una conferencia de prensa brindada en Johannesburgo, donde se lleva a cabo la Cumbre de los Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).

El Gobierno brasileño sostuvo que el acuerdo en yuanes de las reservas argentinas y reales aleja la posibilidad de incumplimiento por parte de Argentina.

Según el ministro, la operación implica la conversión directa del yuan en real por parte del estatal Banco do Brasil en Londres, por un total de hasta 140 millones de dólares.

“Los exportadores de Brasil pueden tener algún flujo de ventas de sus productos con 100% de garantía. Para Brasil, no hay problema, porque la tasa de cambio se hará con el yuan por real y esto también le asegura al Tesoro Nacional que no hay riesgo de incumplimiento. Una garantía que el Tesoro consideró adecuada y que el Banco do Brasil aceptó, tal como se presentó”, aseguró Haddad.

 

A raíz de la sequía sufrida por Argentina y la consecuente falta de ingreso de divisas por la venta de granos, los gobiernos de Argentina y Brasil negocian un mecanismo para facilitar el pago a 200 empresas exportadoras brasileñas que venden en territorio argentino sin tener que aguardar el flujo de reservas en el Banco Central.

En mayo pasado, el presidente Alberto Fernández y su colega Luiz Inácio Lula da Silva conversaron en Brasilia sobre las posibilidades de financiar las exportaciones brasileñas pero Brasil buscaba mayores garantías debido a la falta de dólares de Argentina.

Lula propuso, sin éxito, que el Nuevo Banco de Desarrollo, el banco de los Brics, pueda financiar las exportaciones de Brasil a la Argentina.

Tampoco avanzó la idea de que el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil, el mayor banco de fomento de las Américas, pueda financiar las exportaciones con tasas subsidiadas a la Argentina.

La poderosa Federación de Industrias del Estado de San Pablo había reclamado al gobierno encontrar mecanismos para no perder mercados ante China en Argentina debido a las trabas por la falta de divisas para que sean compensadas las ventas externas.

Argentina logró mediante el acuerdo cambiario swap con China mantener el flujo comercial con el país asiático, algo que estaba buscando Brasil, cuyas principales exportaciones industriales van al mercado argentino.

Argentina es el tercer socio comercial de Brasil después de China y Estados Unidos pero a diferencia de los dos primeros es el principal comprador de productos industrializados.

Lula había dicho el martes durante el programa Conversando con el Presidente que la propuesta de Haddad a la Argentina era “serena y pragmática”, al defender la desdolarización de la economía mundial, el uso de monedas locales entre socios comerciales y la creación de una unidad que reemplace al dólar en el comercio entre los países Brics.