El acampe encabezado por el dirigente social Juan Grabois, cercano a Cristina Kirchner, en la estancia Lago Escondido del británico Joe Lewis, en Río Negro, finalizó este miércoles al mediodía, después de 24 horas. Los manifestantes se fueron, pero amenazaron con volver.
Durante el martes hubo tensos momentos entre los manifestantes con empleados del establecimiento y policías provinciales. Algunas de esas discusiones quedaron grabadas en un video, en el que el se ve a Grabois decirle a un trabajador que ”el inglés te odia”.
Grabois explicó que el acampe, que se realizó a las orillas del lago, es porque Lewis impide el paso del público hacia el espejo de agua, que no es de él sino patrimonio del pueblo argentino. En ese sentido, sostuvo que así como las Malvinas, también el lago Escondido es argentino: “Las Malvinas son argentinas, lago Escondido también”.
Mientras tanto, la movida generó un respaldo inesperado: “Lo puede hacer. Fue la Coalición Cívica la que planteó que tenía que haber servidumbre cuando Lewis cerró el Lago Escondido. Así que si quiere acampar ahí, hay buena trucha. Todo el mundo tiene derecho a acceder”.
Las carpas de los manifestantes se instalaron justamente sobre la playa, al borde del lago. Pero si bien habían prometido no acercarse al casco de la estancia, una columna de los manifestantes llegó hasta las puertas de la casa, donde un cordón de trabajadores resguardó el ingreso. Fue para protestar porque se habían encendido los aspersores de riego, y los habían mojado.
Entonces, Grabois le reprochó a uno de los trabajadores: “El inglés te odia, te desprecia”.
“Yo sé que ustedes tienen un empleado inglés, sé que no es su culpa, sé que están laburando. El inglés los desprecia a ustedes igual que nos desprecia a nosotros. No les va a dar un aumento, no les va a dar un premio. Los detesta, les paga poco, los tiene laburando en condiciones de mierda”, le dice Grabois al grupo de trabajadores que resguarda la estancia.
Luego sigue: “¿A vos te parece bien que al lago lo tenga el inglés? Yo entiendo que le tengas que chupar las medias al inglés. El te odia, te desprecia”.
Otro video, muestra un nuevo cruce: Grabois desafía a que “levante la mano” alguien que lo habría amenazado. “Cagones”, grita entonces y se ve la tensión con la policía.
Son 80 personas las que protagonizaban el acampe, del que también participaba el diputado nacional Federico Fagioli.
La irrupción del dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y el frente Patria Grande se dio semanas después de que se conociera la estadía que compartieron en Lago Escondido los jueces federales Julián Ercolini, Carlos Mahiques, Pablo Yadarola y Pablo Cayssials; el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro; el jefe de los fiscales porteños, Juan Bautista Mahiques, un exfuncionario de inteligencia y directivos del Esta mañana, Grabois había advertido en sus redes sociales que estaba “intentando llegar al Lago Escondido, patrimonio de todas y todos los argentinos pero sólo accesible para algunos privilegiados: los jerarcas del Poder Judicial, las fuerzas de seguridad, los medios hegemónicos y los políticos serviles al poder real”.